El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de tres años de cárcel y el pago de 12.000 euros de indemnización a un hombre que violó a su sobrina de 11 años, que padece un retraso mental ligero, tras atraerla a su propia vivienda con el anuncio de que podría jugar con una videoconsola. Un auto del Supremo, al que ha tenido acceso Efe, rechaza el recurso de casación del acusado y dice que no se vulneró su derecho a la presunción de inocencia ni a un proceso con todas las garantías.
El acusado E.B.E., de 38 años, convivía con la niña en Lora del Río (Sevilla), donde él ocupaba una habitación de la planta baja y el resto de la familia la de arriba y, en un día no determinado del verano de 2001, llamó a su sobrina a su habitación y la menor accedió en la creencia de que iba a jugar con una videoconsola. Cuando ambos se encontraban en el interior, el acusado cerró la puerta, quitó a la niña la ropa interior y la tumbó en una cama, a la vez que le pedía que le tocara los genitales. La víctima se negó y entonces el acusado le pidió que le hiciera una felación, y al negarse de nuevo la niña, se produjo la violación.
El Tribunal Supremo confirma la interpretación de la Audiencia de Sevilla de que el delito fue corroborado por la declaración de la víctima, de la prima a quien contó lo sucedido, de otro primo que observó que la menor rehuía al adulto y por los informes psicológicos de los juzgados de Sevilla.
El tribunal sevillano "ha valorado y ponderado racionalmente las pruebas practicadas, sin separarse de la lógica, los conocimientos científicos o las máximas de experiencia", según el Supremo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario